Hoy me he dado cuenta que el blog ha superado el ¡¡¡ medio millón de visitas!!!

Me parece mentira… aún recuerdo cómo empezó… con la ayuda de mi comadre Lara, que me iba guiando en este mundo para mi desconocido de los blogs y las páginas webs y los códigos HTML y los Widgets… Por si no se lo había dicho antes aprovecho: GRacias LAra :*

Iba subiendo a este blog mis recopilaciones de artículos de lactancia, de sueño infantil, de fotos de portabebés… en definitiva de todo lo que desde que nació Iker iba buscando y guardando y que luego, ya en el grupo de lactancia, me encargaba de mandar por correo a los padres que querían información.

Poco a poco pasó a ser algo más que un rinconcito recopilatorio, se convirtió en mi ventana de maternidad al mundo.

Gracias al blog he compartido, he aprendido, he enseñado, me he desahogado, he exorcizado demonios personales, he reído, me he emocionado y he llorado… de pena y de alegría.

Quiero dar las gracias a todos los que se toman el tiempo de leer, pero sobre todo a quienes comentáis… porque no sabéis cuántas veces vuestros comentarios me han animado en momentos malos, lo acompañada y comprendida que me he sentido. La de veces que he releído algunos comentarios cuando me faltaban oídos cercanos y palabras de ánimo audibles. Porque cuando hablamos de tribus virtuales no es un mito, ni un ideal, sino una realidad.

Estos años de mantener el blog han sido años muy intensos, el puerperio ya de por sí lo es… y el ir compartiendo esas sensaciones de seguro ha contribuído a ser la persona y la madre que soy… Sobre todo el leer a todas las madres que me escriben y me cuentan sus historias, a veces de forma pública, como comentarios, otras veces en privado por email, incluso por teléfono… Eso y el trato semanal con madres y bebés en el grupo son mi gran escuela…

Yo, que ya sabéis que soy muy anti-titulitis, siempre desconfío de los «cursos de fin de semana» que fabrican sabiduría a golpe de seminario ( y de talonario). No es tema ahora y sé que cumplen un papel muy importante… pero NADA sustituye el contacto continuo, por días, semanas, meses y años con otras mujeres y sus hijos… Así que gracias a quienes me habéis hecho un huequito en vuestras vidas y quienes tenéis un huequito en la mía…

Este blog ha hecho posible que mi experiencia como acompañante de la maternidad crezca…  incluso ha convertido un sueño en realidad: publicar un libro. No está mal para «una simple madre»… porque al final por eso estoy aquí… eso soy:

una simple madre

Gracias