Soy Asesora de Lactancia.
Me formé como monitora de lactancia con una asociación. Los seminarios lo pagué yo, los libros, los viajes, el hotel cuando eran fuera de mi isla. Me pagaba de mi bolsillo la gasolina, los taxis cuando no tenía coche, tanto para ir al grupo como para ir a hacer visitas domiciliarias. La asociación nunca me pagó nada. Al contrario, a mí me costó dinero mi formación. Es cierto que el tiempo que estaba en el grupo una monitora con experiencia aprendí de verla a ella. Aprendí lo bueno que hacía e intentaba ser consciente de las cosas que no me gustaban para no repetirlas.
Los Grupos de apoyo a la lactancia (GALM) nacen con la idea del apoyo «madre a madre». En origen no había unas sobre otras, eran madres que amamantaban apoyando a otras madres que amamantaban.
Cierto es que la experiencia iría definiendo quiénes tenían respuestas que otras desconocían. Y también es cierto que algunas van al grupo solo mientras sus hijos maman y otras deciden seguir tras el destete para seguir compartiendo su experiencia con las más nuevas.
Imagino que de ahí surgió la figura de «monitora» o «líder» como en La Liga de la Leche.
Os copio al respecto la información de esta asociación pionera y una de las más famosas y activas a nivel internacional:
¿Es lo mismo una monitora de un grupo de apoyo que una asesora?
No.
- Una asesora es alguien que se forma para dar un servicio profesional.
- Que no solo se forma con la parte teórica y práctica, sino que se forma en cómo trasmitir sus conocimientos de la mejor forma.
- Una asesora atiende consultas privadas en su domicilio o en el de la madre que la requiere.
- Una asesora atiende las «urgencias» que no pueden esperar hasta la siguiente reunión del GALM.
- Una asesora se plantea sus asesorías como un trabajo y como tal lo cobra.
- Una asesora cobra porque te está dedicando SU TIEMPO, el que es de ella, ese que se sale del número de horas que ella ha decidido (o no) regalar a su comunidad o al mundo yendo a un grupo de forma desinteresada o respondiendo X correos o atendiendo el teléfono.
Si quieres un servicio gratuíto… no, mejor dicho, que gratis no hay nada, si quieres un servicio donde el coste no lo asumas tú sino que lo asuma la persona que te lo ofrece, acude a un grupo de apoyo a la lactancia. Pero ve ese día y hora.
Si quieres que te atiendan en el preciso momento en que necesitas respuestas, por teléfono, o en persona, busca una asesora. Y recuerda que lo justo es que sea retribuída por ese trabajo.
Pregúntale si puede atenderte, su tarifa y sus condiciones.
No esperes que lo haga asumiendo ella el coste. Porque no es justo ni ético.
Ten en cuenta que lo gratis no existe (salvo el aire de momento).
Que no pagues algo no significa que no cueste algo.
EL local donde yo me reúno con el grupo tiene un coste, que asume el ayuntamiento porque entiende que es un servicio a la comunidad. El mantenimiento y limpieza de ese local lo asume la comunidad de vecinos por lo mismo. El trabajo de las monitoras que no van solo cuando les apetece sino también cuando no les apetece, no es que sea gratis, es que lo asumen ellas por lo mismo, porque creen que prestan un servicio que no presta nadie más.
Exigirles que hagan más es indecente, inmoral y egoísta.
Si eres madre, padre, matrona, IBCLC, o lo que quiera que seas… si eres de l@s que cree que esa labor no debe cobrarse… HAZLA TÚ COMO TÚ CREAS. Y que las madres decidan.
Yo soy asesora de lactancia, y de porteo, y algunas cosas más. Y le doy valor a mi trabajo, a mi tiempo, a mi experiencia, a mi formación, a mis cualidades como asesora, a mi actitud y a mi aptitud poniendo un precio a mi trabajo. YO PONGO EL PRECIO.
Quien no lo entiende una de dos: o realmente es una persona con un coeficiente muy bajo a nivel intelectual o a nivel moral.
Internet está llena de información pero yo cuando no sé cribar o desconozco el tema prefiero pagar a alguien experto que me dé la solución de forma segura, clara e inmediata. Eso hacemos muchas veces las asesoras cuando respondemos consultas.
Así que la próxima vez que plantees una consulta a alguien, sea del ámbito que sea, porque confías en su experiencia, criterio y formación, pregúntate:
«¿Espero que me responda gratis?
¿Por qué?
¿Cuántas personas como yo le preguntarán a esta misma persona al cabo del día?
¿Creo que tengo derecho a exigir una respuesta?
Si no la obtengo, porque tampoco me he ofrecido a pagar por ese tiempo y/o conocimiento, creo que tengo derecho a enfadarme?
¿Quién me da derecho a ser exigente incluso sarcástica al exigirle respuesta?
¿Cómo me sentiría yo si alguien me exigiera hacer mi trabajo sin cobrar?»
Creo que es un buen momento para plantearnos estas reflexiones… y sobre eso estad al tanto de mi próximo post sobre el VOLUNTARIADO.
Mientras tanto, me encantará oír vuestras opiniones al respecto.
Hola me gustaria orientarme con una asesora de lactancia ya q tendre gemelos me gustaria ver si podria venir a mi domicilio
Hola Yolvi.
Escríbeme a mi correo para decirme dónde vives y contactarte con alguna asesora de lactancia cercana.
Saludos
Hola Noemí,
Me gustaría contactar con una IBCLC consultora de lactancia. En principio estaría en Madrid desde el día 29-31 de mayo, parada de metro Tetuán o Valdeacederas. También estaría en Gran Canaria desde el día 1-14 mayo. Tendría que ser una IBCLC certificada.
¿Me puedes decir alguna sugerencia?
Espero tu respuesta cuando puedas.
Muchas gracias por adelantado.
Un saludo,
Hola Carmen:
EN Madrid tienes a Kika Baeza por ejemplo. Te pongo el enlace a su web
http://www.centroraices.com/kika.html
EN Gran Canaria hasta donde yo sé no hay IBCLC.
De todos modos la propia asociación internacional de IBCLCs tiene un directorio, entra en su web y busca por la zona que te interese.
Saludos