Hoy tras unos 3 años he puesto la Tv porque entrevistaban a una amiga doula, Macarena Díaz. Enterarme que salía en el programa de Ana Rosa Quintana ya auguraba que íbamos a ver cualquier cosa menos periodismo con rigor.
Reconozco que tengo prejuicios contra la Sra. Quintana a pesar de que nunca me he tomado un cafe con ella, pero no he podido evitar formarme una opinión sobre ella, y más en asuntos de maternidad, por lo que le he oído a lo largo de los años.
Aún recuerdo cómo hablaba de una madre que sufrió un aborto espontáneo.
Que digo yo que si no sabe qué decir, que se calle, o dado que tiene un programa de Tv, pues que se informe ¿no?. Creía que el periodismo se basaba en contrastar la información.
Pero no, esta mujer quiere ir de periodista cuando en realidad es opinóloga.
A ver, señora Quintana, que tiene usted todo el derecho del mundo a tener su opinión sobre las doulas, sobre parir, sobre la epidural, sobre la placenta, y sobre el peinado de Macarena si quiere, pero entenderá usted que a la mayoría de los mortales sus opiniones nos la traen al pairo.
Que tiene usted derecho a no escuchar lo que le explican 30 veces y a mantenerse en sus 13. Que le han dicho por activa y por pasiva que las doulas NO ASISTEN PARTOS. Tiene usted derecho incluso a dejarse en evidencia diciendo que usted no pare como una mamífera. A usted le aterra ese concepto y a algunas lo que nos aterra es pensar que igual usted es el eslabón perdido entre anfibio y reptil o algo similar, porque las mujeres de este planeta, todas, somos mamíferas, y cuando parimos, parimos como mamíferos que somos, del mismo modo que gestamos en el útero y tenemos mamas que producen leche. Igual si coge usted un libro de biología de sus hijos, le asombra ver que seguimos, por mucho adelanto en la medicina, en esa clasificación.
Aunque para usted en la Rúber con 5 ginecólogos y una bata de Loewe, o aunque le hagan una cesárea programada y no dé teta es usted mamífera.
La cuestión es que si usted es así de ignorante es cosa suya evidenciarlo en Tv, pero si se hace una entrevista sobre una noticia, lo que espera la audiencia es obtener información sobre la misma. Porque si de lo que se trataba es de decir lo que a usted se le antoja sobre el tema, pues se hubieran ahorrado invitar a nadie.
Aparte su «perlita» sobre parir como mamíferas, ha soltado usted por la boca barbaridades como si fueran verdades absolutas, cosa que por otro lado no es nuevo en su profesión, y más en su cadena y en ese tipo de programas. No saben ustedes distinguir evidencia de creencia, noticia de opinión, pantallazos de informes, y lo peor no saben distinguir vida privada de prácticas profesionales de un colectivo.
-Hacer una pregunta directa y personal a la invitada cuando han quedado de antemano que no se haría es, como poco, de mal gusto, y como mucho una encerrona sucia y burda. Porque además, si Macarena ha ingerido o no placenta eso sólo le importa a ella. Lo que se trataba era de saber si ella ha obligado a alguna de las mujeres que ha acompañado a hacerlo. Si no saben ustedes distinguir esas dos cosas, quizás deberían volver a la facultad de periodismo. Si llego a estar yo allí le habría preguntado si usted dio de mamar a sus mellizos.
Y no me diga que eso es su vida privada. Si Macarena ingirió o no placenta también y según su compañero preguntar no es ofender, así que repito: ¿Amamantó usted a sus mellizos como recomienda la OMS hasta mínimo los 2 años? ¿No? Porque a mi igual me aterra que usted al no hacerlo puso en riesgo su salud. Igual no sabe que está demostrado que alimentar artificialmente a un bebé incrementa los riesgos de padecer muchas enfermedades.
¿No le gusta a usted que le pregunten cosas directas y personales? Recuerde: » preguntar no es ofender». Y dado que su argumento hoy ha sido «que no puede ser decisión de la madre cómo pare o lo que hace durante el parto ya que es una mujer que está dando a luz a un ser, que según usted es una persona y tiene entidad jurídica… » pues yo esgrimo el mismo argumento. Dejando a un lado que con la Ley actual para tener entidad jurídica hay que estar vivo 24 horas tras el parto*, vamos a suponer que eso es así y que el bebé tiene derechos a los que la madre tiene que atender. Yo le pregunto, ¿eso aplica a «todos los derechos del bebé» o sólo a los que a usted le da la gana? Porque el bebé entonces tiene derecho a ser parido, y a no ser extraído por la fuerza en una operación quirúrgica no fisiológica como es una cesárea, a no ser que esta sea realmente necesaria. ¿Qué hacemos con las cesáreas programadas? ¿En ese caso opina usted igual? ¿y con la lactancia, repito? Porque el bebé tiene derecho a recibir alimento diseñado para él. ¿Reconoce usted entonces el derecho de las mujeres de decidir no amamantar? ¿o en ese caso la mujer sí tiene potestad para hacer lo que a ella le venga en gana saltándose las recomendaciones unánimes de todas las autoridades sanitarias mundiales? La verdad es que me hubiera gustado estar hoy en ese plató, hacerle esa pregunta, ver su cara y sobre todo oír su respuesta. Que demagogia sabemos hacer todas. Y algunas además, como este tema nos pone de muy mala leche, nos sale la vena que ríase usted de la Patiño.
Por otro lado, nos vende usted que la panacea del parto es la epidural. Una vez más, ¿le ha preguntado al bebé? ¿Sabe usted lo que implica para el bebé la anestesia? ¿le interesa ? ¿tiene derecho la mujer a decidir anestesiarse no sólo ella sino también a su hijo? ¿Y la oxitocina sintética? ¿le pregunta la madre a su bebé si quiere recibir esa droga con los efectos secundarios que conlleva?
Señora Quintana es usted la reina de la demagogia. Si realmente le preocupa la salud de los bebés, hasta el punto según usted, de restringir los derechos de la madre, aplíquelo a todas las prácticas que rodean el embarazo, el parto y el posparto.
O todos moros, o todos cristianos.
-Cuando dice usted que el papel de la doula lo tiene que hacer el padre, una vez más es que sube el pan cuando usted habla. ¿Cree usted que todas las mujeres que van a parir cuentan con un «padre de la criatura»? ¿Cree que todos los padres quieren acompañar ese proceso? ¿Cree usted que todos los padres que quieren pueden sostener a su esposa en ese trance? Porque le recuerdo que la mayoría son tan nuevos en esas lides como las mujeres, con el agravante que no tienen idea de qué está pasando. Un hombre nunca va a entender lo que es un parto como una mujer que ha parido. No creo que necesite explicarle eso.
Además que habrá mujeres que no quieran a su pareja en el parto. ¿O cree usted que todas las realidades familiares son como en La casa de la Pradera?
Si una mujer quiere una doula con ella, o a su prima, o a la vecina del quinto mientras pare, tiene derecho a tenerla. Esté o no, además, su pareja, que puede ser el padre o no. Esté o no su madre, o la estampa de la Virgen de los desamparados.
-Del tema de la placentofagia paso de comentar nada. No tiene sentido. Si son ustedes periodistas deberían haberse informado ustedes del estudio que está llevando a cabo un médico en un hospital español, y no que lo tenga que citar la doula, que como ella misma ha dicho, no es sanitaria.
-Les ha causado también estupor a su equipo que haya quien quiera cortar el cordón umbilical con una vela. Que digo yo, que por qué algunos ritos les causan tanto «desagrado». Si alguien en base a sus creencias quiere cortar el cordón con una vela o con los dientes, ¿a ustedes qué más les da?
Que yo sepa usted ha hecho pasar a sus hijos menores de edad por un ritual que es beber un vino que se ha transmutado en sangre de Cristo. Eso es un ritual en toda regla. Pero claro, ese está tan instaurado que ese sí es válido. Pues le vuelvo a informar que según la Ley española hay libertad de culto, e igual que usted bautiza a sus hijos y estos hacen la comunión en un ritual con sangre de por medio, pues hay mujeres que deciden hacer otro tipo de rituales si les da la gana. Mientras no atenten a una Ley establecida en nuestro código, pueden hacerlo. Le guste a usted o no Sra. Quintana, que eso a día de hoy no es delito.
Quiere usted ir de fina y resulta de lo más cateta señora mía.
En fin, que vuelvo a reafirmarme en mi decisión de no ver TV, porque a mí lo que me aterra es que mis hijos oigan a personajes como usted soltando opiniones absurdas y trasnochadas como verdades. Eso sí es un riesgo para la salud.
Lea usted un poquito e infórmese sobre índices de mortalidad y morbilidad perinatal en países donde los partos normales se atienden en casas, no en hospitales. Y luego, me invita a su programa y charlamos un ratito. Eso sí, recuerde: «preguntar no es ofender» así que recuerde que donde las dan las toman.
Y como a mí me gusta citar mis fuentes… aquí pongo el vídeo . Aviso que puede perjudicar seriamente la salud de las personas pensantes, sobre todo si son mamíferas.
*Edito para añadir que los artículos 29 y 30 del Código Civil han sido modificados recientemente y la entidad jurídica ya existe desde el nacimiento sin la espera de 24 horas.
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